Así definen los cuatro jóvenes emprendedores que componen Sheedo su papel "plantable" premiado como mejor proyecto en el IV Foro de Inversión Verde. El papel de Sheedo contiene semillas y puede ser plantado después de ser usado.
Érase una vez…
Cuatro emprendedores que apostaron por hacer las cosas de una forma más lógica: poniendo en valor las personas y la naturaleza.
El papel
Decidieron revolucionar la industria papelera, uno de los culpables de la desaparición de nuestros bosques. No más papel de usar y tirar, si no de usar y plantar.
El molino
Empezaron la aventura con el maestro papelero Antoni Sardá, que dio con la formula perfecta para crear el papel con vida: sheedo.
Cuidamos el planeta
Con sheedo, consiguieron sustituir la celulosa por el algodón reciclado, las máquinas por las personas y los aditivos químicos por la semilla.
Volamos
El viaje continúa y sheedo vuela a china, a los orígenes del papel. Ahí descubren un país mágico que les recibe con los brazos abiertos y les lleva a la innovación y creación de nuevos productos.
Crecemos
De acuerdo con sus valores, sheedo crea un nuevo taller en china, en la zona rural de qingpu. Consiguen fomentar la economía local y transportar al público chino a sus orígenes y tradiciones, respetando siempre las personas y la naturaleza.
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